¿Puedo pasar la ITV con un retrovisor roto?
Los espejos retrovisores son un elemento fundamental para cualquier coche, ya que nos permiten ver qué ocurre detrás cuando vamos por la carretera. Por eso, son obligatorios para circular con nuestro vehículo. No obstante, para cada vehículo se consideran imprescindibles unos y opcionales otros. Por ejemplo, para vehículos de transporte de personas y turismos el retrovisor obligatorio son el del lado del conductor y el del interior. El retrovisor derecho es obligatorio solamente para coches matriculados a partir de enero de 2010. Eso sí, si no contamos con visibilidad trasera, los dos espejos de fuera son siempre obligatorios.
No obstante, hay determinados vehículos como las furgonetas, que no cuentan con visibilidad interior, por lo que en ese caso el retrovisor derecho es imprescindible. En vehículos de gran tamaño de transporte de mercancías, como trailers, camiones, autobuses furgonetas es obligatorio contar con espejos retrovisores de gran angular y los exteriores de proximidad, así como los exteriores principales.
Las motos y cuadriciclos que cuenten con carrocería cubierta tienen que llevar el izquierdo y el interior de forma obligada, siendo el derecho opcional, como ocurre con los turismos. En quads, vehículos de tres ruedas y cuadriciclos cuya carrocería no cubra al conductor, serán obligatorios los dos retrovisores de fuera.
Sin embargo, aunque algunos retrovisores sean opcionales, es aconsejable llevarlos, ya que incrementa nuestro grado de visibilidad, por lo que resulta más seguro a la hora de hacer maniobras.
¿Qué pasa si voy a la ITV con u retrovisor roto?
Si un día te das cuenta de que alguno de los retrovisores de tu vehículo se ha roto, debes saber que la ITV lo califica como un defecto grave cuando los que están rotos son los espejos obligatorios o cuando no los hay, la colocación no es adecuada o la altura no es la reglamentaria. Hay que tener en cuenta que los retrovisores son una extensión de nuestros ojos para circular sin riesgos. Por esta razón, si no cumplimos con la normativa y con las pautas del fabricante, lo más probable es que no pasemos la ITV.
Se calificará como defecto leve si los espejos que están rotos son los opcionales y si presentan sujeciones defectuosas pero sin peligro de que se caigan.
Así pues, si tienes algún retrovisor roto, en Talleres Yepes (Yeles) te recomendamos que lo soluciones cuanto antes, ya que esto impide una buena visión, lo que compromete no solamente nuestra propia seguridad, sino también la del resto de conductores que circulan por la vía.
Recuerda que reemplazar los retrovisores por otros es una reparación de carrocería, por lo que tendrás que cumplir con todos los trámites de homologación para que sean aceptados. Necesitarás la marca, el número de referencia y la contraseña de homologación europea si vas a cambiar la pieza completa. Ten en cuenta que circular con unos retrovisores sin homologar también se considera como un defecto grave en la ITV, por lo que tampoco podrás pasar la ITV.
Pero no sólo es importante arreglarlos para poder pasar la ITV con éxito, sino también porque nos exponemos a graves sanciones por no llevar los retrovisores. Generalmente, conducir sin alguno de los retrovisores obligatorios conlleva una multa de unos 200 euros aproximadamente, que puede reducirse a 100 euros por pagarlo dentro de plazo. Además, los agentes de tráfico pueden inmovilizar nuestro coche si consideran que supone un peligro para la seguridad vial debido a las deficiencias.